Cáncer de riñón: inmunoterapia en la primera línea
Los fármacos que usan las propias defensas se consolidan gracias a la aprobación este 2021 de dos nuevas combinaciones. Conversamos con el experto de Clínica Mayo, doctor Brian Costello, sobre las expectativas de vida de los pacientes.
Es uno de los tumores que mejor demuestra la revolución terapéutica que protagoniza la oncología médica: el cáncer renal avanzado y diseminado cuenta hoy con un abanico creciente de alternativas del tipo inmunoterapias y terapias dirigidas (target), las que brindan resultados impensados hace apenas 15 años.
Estos progresos benefician a varios tipos enfermedades oncológicas, pero en el caso del riñón es notable. Una buena noticia, porque en Chile su diagnóstico va en aumento. Según la agencia de la OMS Globocan, en 2020 hubo 2.168 nuevos casos de cáncer renal, enfermedad que causó 1.023 muertes en el mismo período.
“Si damos una mirada histórica, lo primero que tuvimos fue el nivolumab, una inmunoterapia para segunda línea (se usa al fracasar el primer tratamiento) y que después pasó a primera línea”, explica a CancerLATAM -a través de zoom- el doctor Brian Costello, profesor asociado de Oncología y Urología de Clínica Mayo Rochester.
lo más exitoso del año pasado fue la nueva aprobación para primera línea también de una inmunoterapia más un fármaco dirigido»
Doctor Brian Costello (Clínica Mayo)
En 2018, la FDA aprobó para primera línea la combinación de inmunoterapias -es decir, fármacos que usan las propias defensas del cuerpo- de ipilimumab y nivolumab contra este tumor.
Y en 2019 se dio luz verde a dos de estos tratamientos más un inhibidor de la tirosina quinasa (pembrolizumab más axitinib, y avelumab más axitinib).
“Lo más fascinante de estas mejorías es que benefician a los pacientes con tumores avanzados (estado 4) metastásicos. Pero lo más exitosodel año pasado fue la nueva aprobación para primera línea de una inmunoterapia más un fármaco dirigido (nivolumab más cabozantinib) y, pronto en semanas o meses, viene otra combinación más (pembrolizumab más lenvatinib)”, detalla el doctor Costello, quien también es consultor global de Clínica Mayo Internacional.
Entonces, en total, habrá cuatro aprobaciones para primera línea más otra que combina dos inmunoterapias, en plena pandemia.
Lo que más entusiasma a Costello es que los años de sobrevida en tumores avanzados es una meta que se está moviendo:
“Cuando hablo con los pacientes sobre los resultados esperados de estas terapias, la buena noticia es que aún no tenemos una respuesta definitiva, porque vemos algunos que responden mucho mejor que lo pensado, y muchos de ellos con una respuesta completa.”
Un ejemplo concreto: al usar la combinación de pembrolizumab y axitinib, la tasa de respuesta de los pacientes será probablemente de 50 a 60%, pero en algunos puede llegar a 70%, algo que nunca se había visto.
“Entonces, en general, lo que teníamos en casos metastásicos eran sobrevidas de un año y medio a dos años, pero con estas terapias aún no sabemos, porque vamos en seguimientos de 24 meses y más, y todavía no alcanzamos la media”, explica Costello.
cuando hablo con los pacientes sobre los resultados esperados de estas terapias, la buena noticia es que aún no tenemos una respuesta definitiva, porque vemos algunos que responden mucho mejor que lo pensado»
Doctor Brian Costello
¿Estos avances están haciendo desaparecer la quimioterapia?
Correcto, es muy claro que la quimio estándar tradicional ya no juega un papel en el tratamiento del cáncer de riñón, gracias a las inmunoterapias y a las terapias dirigidas. Sólo la usamos en situaciones muy selectivas. Excepto eso, la quimio está desapareciendo completamente del tratamiento del tumor renal.
¿Hay algún tipo de prevención -estilos o hábitos de vida- que permitan reducir el riesgo de este cáncer?
No que sepamos. Puede haber algo que esté ligeramente relacionado, pero no hay ningún estilo de vida claramente definido que pueda tener un efecto preventivo. Lo que le digo a mis pacientes es que, si tienen una vida saludable, pueden enfrentar mejor la enfermedad y sus tratamientos, pero en términos de prevenirlo, la respuesta corta es no.
Costello destaca que el 50% de los tumores de riñón es detectado de manera incidental. Es decir, alguien se hace un escáner por algún otro motivo y le encuentran una lesión maligna.
Por fortuna, la mayoría de las veces está encapsulado y dentro de los límites del órgano, por lo que es posible de erradicar con cirugía. Pero un tercio de los casos, al momento del diagnóstico son metastásicos, justamente los que hoy gozan de un pronóstico cada vez mejor.