120 pacientes con cáncer de piel recibieron inmunoterapias en el sistema público

Cuando comienzan los días de sol es bueno recordar que el melanoma -un agresivo tumor de la dermis- es otra pandemia que va al alza en todo el mundo. Chile no es la excepción. La buena noticia es que cada vez hay más tratamientos de última generación capaces de mejorar el pronóstico de quienes enfrentan esta enfermedad ya metastásica.
¿Qué hago si me diagnostican un tipo de cáncer que requiere un fármaco que no estoy en condiciones de pagar y no aparece en la lista de prestaciones GES ni de la Ley Ricarte Soto (LRS)?
Esta pregunta asola a quienes son atendidos en el sistema público, cuando reciben el doble golpe que significa la noticia de tener una enfermedad cuyo tratamiento es de alto costo y su acceso no está garantizado por el estado.

antes de abril de 2019, año en que se crea el DAC, en el sistema público no había nada para melanoma metastásico: sólo podíamos dar algunos tratamientos paliativos y algunas quimioterapias con baja y corta respuesta en el tiempo»
Doctora Mary Ann Stevens (Hospital del Salvador)
Con el propósito de orientar a esos pacientes, la Asociación Chilena de Agrupaciones Oncológicas (Achago), presentó tiempo atrás un seminario online titulado “¿Qué es el DAC?” (Comité de Drogas de Alto Costo), organismo dependiente del Ministerio de Salud (Minsal) que nació en 2019 justamente para atender estas demandas.
CancerLATAM asistió a esta conferencia y constató que un número significativo de pacientes beneficiados con el programa DAC corresponde a aquellos que presentaron melanoma, un agresivo tumor a la piel que afecta a las células encargadas de producir su pigmento (melanocitos) y cuya incidencia va al alza en todo el mundo.
Ahora que comienza la primavera y los días de sol, es bueno recordar que Chile no es la excepción en este incremento que algunos expertos consideran otra pandemia: el año pasado, en plena crisis sanitaria, 857 personas fueron diagnosticados con la enfermedad, contra los 666 registrados en 2018. Es decir, casi 200 chilenos más, según las cifras reportadas por Globocan, una entidad que depende de la Organización Mundial de la Salud.
Como decíamos, la buena noticia es que a pesar de que esta patología no está ni en el GES ni en la Ley Ricarte Soto, un total de 120 pacientes fueron tratados con inmunoterapia, fármacos de alto costo que reactivan las propias defensas del organismo para destruir el tumor y cuya aplicación en este cáncer de piel fue el espaldarazo que llevó a sus creadores -los científicos James Allison y Tasuku Honjo- a obtener el Premio Nobel de Medicina 2018.

“Antes de abril de 2019, año en que se crea el DAC, en el sistema público no había nada para melanoma metastásico: sólo podíamos dar tratamientos paliativos y algunas quimioterapias con baja y corta respuesta en el tiempo. Es decir, no había una herramienta óptima para tratar a estos pacientes”, explica la oncóloga Mary Ann Stevens, quien atiende en el Hospital del Salvador y en la Clínica Alemana.
La doctora destaca que la decisión del DAC fue un gran paso ya que con estas nuevas drogas ha podido tratar a un número considerable de pacientes, muchos de los cuales van a cumplir dos años con una respuesta completa y una excelente calidad de vida. Para una persona con un melanoma avanzado (o con metástasis) este alentador pronóstico era algo impensado antes de las investigaciones de los científicos Allison y Honjo.
Por el momento, Fonasa sólo entrega lo que se conoce como mono-inmunoterapia, es decir, un solo tipo de fármaco (nivolumab o pembrolizumab). Las terapias combinadas en los casos en que no hay una buena respuesta a esta fórmula, no están disponibles para los pacientes del sistema público debido a su alto costo. En el caso de las personas adscritas a seguros privados o Isapres, va a depender de la cobertura de su plan y de cómo responda el seguro catastrófico en caso de ser activado tras el diagnóstico.

el melanoma es en el mundo otra pandemia y lo que más nos preocupa es que, a pesar de que ha mejorado mucho la detección temprana, no hemos logrado aún bajar las tasas de mortalidad»
Dermato-oncólogo Alvaro Pantoja (Falp)
“Se trata de tratamientos muy caros, una inmunoterapia con mono-droga sale cinco millones mensuales, pero si uno le agrega un segundo fármaco como ipilimumab, ese costo mensual se eleva por sobre los 25 millones de pesos”, agrega la oncóloga.
Algo similar ocurre con los pacientes que no responden a las inmunoterapias y son candidatos a las terapias dirigidas o target. Ellos -a diferencia de recibir el fármaco vía endovenosa en un centro de salud- lo toman de manera oral en su propio domicilio.
“A los inhibidores (fármacos dirigidos o target) no tenemos acceso en el sistema público. Hay tres combinaciones, por ejemplo, dabrafenib + trametinib. Uno lo considera como un plan B, cuando no hay respuesta a la inmunoterapia, y en caso de que los pacientes de Isapres tengan los casi 10 millones mensuales que cuesta este tratamiento o si el seguro privado se lo cubre. Además, necesita de un estudio molecular que también es caro -y que tampoco está accesible por Fonasa- para detectar si el paciente tiene la mutación genética específica (BRAF-MEK) donde este tipo de drogas actúan. Por lo costoso, a veces sólo queda la posibilidad de derivar a la persona a algún estudio clínico”, detalla la oncóloga.
El dermato-oncólogo Alvaro Pantoja explica también el por qué la llegada de estas terapias innovadoras ha revolucionado el tratamiento de este cáncer de piel:
“A cinco años hay un aumento en la supervivencia mayor al 30 y 40%, lo cual es para melanoma avanzado o metastásico un hito porque antes no había mucho que hacer”.
“El melanoma -agrega el médico de la Falp- es en el mundo otra pandemia y, lo que más nos preocupa es que, a pesar de que ha mejorado mucho la detección temprana, no hemos logrado aún bajar las tasas de mortalidad”.
Por eso, la tendencia es a tratar este tumor en etapas más tempranas o precoces no sólo con cirugía y radioterapia, sino que sumar este tipo de tratamientos sistémicos como las inmunoterapias y las drogas target.
“Sería la única forma de generar un punto de inflexión para disminuir las curvas de mortalidad”, explica el doctor Pantoja.