El a.C./d.C. del Cáncer de Piel

Termina el verano y es un buen momento para chequear lunares, sobre todo si pasamos unas vacaciones expuestas al sol. La idea es detectar cualquier lesión sospechosa y/o melanoma. Este último es el tumor más agresivo, pero gracias a los nuevos tratamientos la sobrevida de los pacientes mejora.
Dos realidades de signos opuestos conviven actualmente en el terreno del cáncer de piel: mientras esta enfermedad ha ido aumentando en los últimos años -debido principalmente a la radiación ultravioleta, cuyo efecto es acumulativo-, los avances en la investigación científica han impulsado el desarrollo de nuevos tratamientos que están reconfigurando el escenario que enfrentan los pacientes.

son tan importantes los progresos, que se habla de la ‘era antigua y la moderna’. Hasta el 2010, la era antigua, predominaba el uso de quimioterapias en melanomas avanzados, pero la respuesta de los pacientes era muy baja y las posibilidades de sobrevida, prácticamente nulas»
Doctora Erica Koch (Red de Salud UC Christus)
La renovación en el campo terapéutico se inició en 2010 y sus resultados han sido especialmente auspiciosos para quienes padecen melanoma, que es el tumor menos frecuente dentro de esta patología, pero a la vez el más agresivo. En el mundo, se detectan al año 3,4 casos por 100 mil habitantes, tasa que en Chile llega a 3 casos por 100 mil habitantes, según explica Erica Koch, oncóloga de la Red de Salud UC Christus.
Según el último informe de Globocan 2020 -organismo dependiente de la OMS-, este tipo de tumor varió de 666 a 857 nuevos casos diagnosticados en apenas dos años. O sea, el cáncer que en Chile tuvo una mayor alza en su incidencia. En el mismo lapso, fue la causa de muerte de 302 personas.
Hace una década, el diagnóstico tardío de esta enfermedad a la dermis constituía una sentencia de muerte, pero los tratamientos más recientes han mejorado considerablemente las expectativas. “Son tan importantes los progresos en esta área, que se habla de la era antigua y la moderna. Hasta el 2010, la era antigua, predominaba el uso de quimioterapias en melanomas avanzados, pero la respuesta de los pacientes era muy baja y las posibilidades de sobrevida eran prácticamente nulas”, precisa.
“Además de tener una eficacia sumamente limitada, las quimioterapias producían una toxicidad celular general y, por lo tanto, muchos efectos adversos”, complementa Leonardo Peruilh, dermato-oncólogo de Falp.
Los tratamientos más recientes se dividen en inmunoterapia y terapia target o blanco. La primera consiste en activar el sistema inmune por medio de anticuerpos para que reconozca las células tumorales como elementos extraños, las ataque y las destruya.
“Su ventaja es que no genera los daños asociados a la quimio -diarrea, vómitos, caída de pelo y cansancio-, aunque un porcentaje de los pacientes desarrolla erupciones cutáneas, picazón y, en los cuadros más graves, colitis y neumonitis. Pero, como contraste, están los beneficios: con una droga, la tasa de sobrevida a cinco años después del diagnóstico llega a 45% y cuando se utiliza una combinación de dos drogas esa cifra sube a 60%”, explica.
La terapia target o blanco, en cambio, apunta a bloquear el crecimiento descontrolado de las células cancerígenas.
“Entre el 40 y 50% de los melanomas presenta una mutación que se llama BRAF, que le da a la célula la capacidad de reproducirse indefinidamente. Con este tratamiento, que viene en pastillas y que el paciente toma en su casa, las probabilidades de sobrevida a cinco años alcanzan al 35%”, dice Erica Koch.

antes, el cien por ciento de los pacientes afectados por melanoma con metástasis cerebral moría en menos de un año y hoy sobrevive el 40 por ciento. Puede parecer modesto, pero es muy significativo»
Dermatooncólogo- Leonardo Peruilh (Falp)
Produce igualmente efectos adversos -generalmente diarrea, fiebre, escalofríos-, pero la mayoría es reversible con la administración de corticoides, que se usan también en el control de reacciones negativas derivadas de la inmunoterapia.
Leonardo Peruilh da cuenta del impacto de los nuevos fármacos con el siguiente ejemplo: “Antes, el cien por ciento de los pacientes afectados por melanoma con metástasis cerebral moría en menos de un año y hoy sobrevive el 40 por ciento. Puede parecer modesto, pero es muy significativo”.
Aunque estas terapias ya están extendidas en los países desarrollados, en Chile sólo existe acceso a dos inmunoterapias a través del Comité de Drogas de Alto Costo (DAC) del Ministerio de Salud: nivolumab y pembrolizumab. “Son las principales y las más eficaces, pero las financia únicamente este mecanismo, porque ningún cáncer de piel está en el GES”, precisa Peruilh.
Con esas condiciones, a un paciente con melanoma avanzado o metastásico que requiere terapia target no le queda más alternativa que postular a los estudios clínicos que emprenden diferentes centros de salud del país, para probar nuevos tratamientos. “Hay que incentivar la incorporación a estos estudios, porque muchas veces existe temor o desconfianza”, explica Erica Koch, quien actualmente se especializa en cáncer de piel en Toronto, Canadá: “He tenido la oportunidad de conocer a muchos pacientes que fueron los primeros en recibir estas drogas en 2011 y 2012. Están curados y me asombro cuando me toca atenderlos”.
Aun cuando la medicina avance a este ritmo, la prevención -evitar la sobreexposición al sol, usar protector solar, revisar periódicamente los lunares- es la mejor aliada en el combate de una enfermedad que seguirá aumentado.
Según las estimaciones, en los últimos cinco años, la incidencia de los diferentes tipos de tumores cutáneos pasó de 20 a 25 por cada 100 mil habitantes, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud. En lo que concierne al melanoma, tanto en Chile como en el resto del mundo afecta más a hombres que a mujeres, diferencia que se atribuye en parte a la mayor conciencia que tiene la población femenina sobre los peligros de la radiación ultravioleta.
En otras palabras, no hay bronceado que sea saludable.