“Las urgencias están colapsadas, y no por Covid”

Un llamado a la prensa a abordar el tsunami de cáncer hizo el doctor Bruno Nervi en el marco del Curso-taller para periodistas de salud y ciencia de América Latina.
El rumbo que tome la pandemia de Covid-19 es incierto, tanto en Chile como en el mundo. Eso sí, aceptar que la naturaleza tiene sus propias leyes no significa bajar los brazos, menos cuando la evidencia científica estima que la crisis sanitaria dejará en nuestro país no sólo una alta mortalidad por el coronavirus, sino que también un exceso de 7.000 muertes por cáncer de aquí al 2023.
Esta resaca es provocada, básicamente, por el atraso en el diagnóstico de enfermedades oncológicas, ya que los pacientes postergaron las consultas por miedo a contagiarse; a que los centros de salud estaban «congelados» atendiendo las urgencias Covid-19, y a la dificultad del sistema sanitario para realizar los exámenes y tratamientos demandados.
Además, hubo una brusca suspensión de los chequeos de rutina donde es posible hacer estudios de tamizaje que permiten la pesquisa oportuna de los tipos más frecuentes de cáncer en la población asintomática, y de esta forma mejorar mucho el pronóstico: mamografía, en el de Mama; PAP, en el Cervicouterino; colonoscopía, en Colon, y antígeno prostático, en Próstata.
“Así como ocurrió con el Covid, también deberíamos congelar hospitales para atender a las personas con cáncer; de lo contrario habrá muchas más muertes de las que hoy tenemos por coronavirus. Por eso los necesitamos a ustedes, periodistas, ya que, si logran transmitir lo que vemos a diario con estos pacientes, los políticos y otros tomadores de decisiones se movilizarán. Los medios de comunicación son esenciales para mover a la acción”, explica a CancerLATAM el doctor Bruno Nervi, médico oncólogo de la Universidad Católica.

Nervi fue uno de los invitados al lanzamiento del Curso-taller para periodistas y comunicadores latinoamericanos de ciencia y salud: “Cáncer, una noticia que la prensa no puede dejar pasar”. Se trata de una iniciativa a la que aún pueden suscribirse los profesionales de la comunicación con sólo un clic en el link https://play.4id.science/fnc01/conferencias. Para quienes ya están suscritos, la invitación es a ingresar a los módulos donde expertos imparten los contenidos necesarios para estar al día con los temas que marcan la pauta noticiosa en salud.
El periodista Amaro Gómez-Pablos, quien moderó el simposio de apertura, destacó que la idea de este taller es “crear redes de contacto, actualización y empatía (…) por medio de una metodología flexible con cinco cápsulas”. A continuación, el consejero de la Union for International Cancer Control (UICC), Kenji López, subrayó que son “la prevención, detección precoz y rigor periodístico al informar sobre nuevos hallazgos científicos”, los ejes de cualquier trabajo de la prensa al momento de abordar las enfermedades oncológicas.
“También que la gente interiorice que no estamos ante algo ajeno a nosotros”, agregó López sobre una patología que en el corto plazo será la principal causa de muerte en América Latina.
para contrarrestar este escenario es necesario tanto una mayor educación como inyectar más recursos»
Doctor Bruno Nervi (Centro de Cáncer UC)
Nervi, quien es director médico del Centro de Cáncer UC y presidente de la Fundación Chile Sin Cáncer, es un convencido de que es la educación el desafío más importante para terminar con la brecha que existe en nuestra sociedad, ya que “la mortalidad por cáncer es 10 veces menor entre quienes recibieron educación universitaria en comparación con quienes tienen menos años de estudio.”
“Es aquí donde la prensa cumple un papel imprescindible al acercar esta realidad -que es dura- a la población y así catalizar los cambios necesarios: son personas que están sufriendo, no sólo números ni estadísticas”, enfatiza el oncólogo, quien hace un llamado “a correr, igual a cómo lo hicimos con el coronavirus.”
¿Y cuál es esa realidad de las que nos habla el doctor Nervi?
En marzo y abril de 2020 las notificaciones GES presentaron una brusca caída -a menos de la mitad- en algunos de los tumores más relevantes para la población chilena. En atención a estos datos, la Universidad Católica y el Foro Nacional del Cáncer realizaron una microsimulación para cinco tipos de neoplasias (mama, cervicouterino, gástrico, colon y próstata), “y el resultado es que en un par de años tendremos un exceso de 7.000 muertes por esta enfermedad”.
Esta cifra de por sí preocupante (7.000), seguro aumentará si consideramos el atraso en los tratamientos oncológicos durante el tiempo de la pandemia. Todavía no están disponibles las herramientas para medir cómo esta variable podría incidir, ni tampoco el país cuenta con un Registro Nacional del Cáncer que permita dimensionar un empeoramiento en las etapas más avanzadas de la patología.
“Lo que viene es un tsunami de pacientes. Hoy las urgencias y hospitales están colapsados, y no por Covid, sino que por otras patologías como el cáncer que no fueron diagnosticadas o tratadas a tiempo”, agrega.
Si fallecen tres chilenos por algún tumor -y una de esas muertes podría haberse evitado por un diagnóstico y/o tratamiento oportuno-, el panorama hoy aparece aún menos auspicioso.
desde que partió la pandemia, un promedio de 2.000 chilenos han muerto cada mes de Covid. Pues bien, en el caso del cáncer esta cifra asciende a 2.500. No podemos silenciar esta realidad»
Doctor Bruno Nervi (Fundación Chile Sin Cáncer)
“Para contrarrestar este escenario es necesario tanto una mayor educación como inyectar más recursos”- explica Nervi- “Este año fueron comprometidos en el sector público 360 mil millones y la idea es aumentarlo a cerca de 400 mil millones para el 2022.”
Por último, el especialista recordó que en 2018 se estableció que en el país existe una importante brecha de inequidad para esta enfermedad -producto de desigualdades en educación, condiciones laborales, calidad de la alimentación, entre otros- y la meta es terminar con ella en el 2028, según lo establecido en el Plan Nacional del Cáncer.
“Desde que partió la pandemia, un promedio de 2.000 chilenos ha muerto cada mes de Covid. Pues bien, en el caso del cáncer esta cifra asciende a 2.500. No podemos silenciar esta realidad”, concluye Nervi.